Sobre la Secretaría Académica

Estimadxs profesorxs, docentes, estudiantes y no-docentes:

 

Hace 476 días, a pedido del Sr. Decano y con el aval del Consejo Directivo acepté el mandato de hacerme cargo de las tareas y responsabilidades derivadas de la imposibilidad coyuntural de designar nuevx Secretarix Académicx.

 

Lo hice sumándolas a mis tareas y responsabilidades como vice-decano y obviamente de manera ad-honorem. Sin transición y encontrándome con una gran cantidad de temas sin resolución, algunos de ellos con excesiva demora y muchos otros atrapados en circuitos burocráticos.

 

Fue una gestión destinada a ser transitoria por la propia resolución que me transfirió las obligaciones y responsabilidades y que tenía por objeto ordenar e implementar las tareas que fueron y son foco de la gestión de este gobierno.

 

Una construcción abierta que reconoce a lxs estudiantes y docentes como protagonistas y los ubica en el centro de su gestión. Entendiendo sus necesidades y respetando los tiempos de cada unx de ellxs –incluyendo a los nodocentes–, para poner al servicio de la comunidad todos los resortes institucionales. Participando en múltiples reuniones, escuchando opiniones en la búsqueda de acuerdos que legitimen las decisiones. Sin prejuicios y entendiendo que en primer lugar está la gente y luego las normas. Nuestra Facultad, como cualquier institución, ES su gente y ésta debe estar por encima de todo.

 

Nuestro proyecto era que pudiera dejar la posta a el/la nuevx Secretarix Académicx a comienzos de este ciclo lectivo 2020, con una Secretaría abierta a la comunidad, en movimiento y funcionando proactivamente, con una transición virtuosa. Pero llegó la pandemia…

 

A partir de allí comenzó otra realidad. Que implicaba un sinnúmero de incertidumbres y el enorme desafío de garantizar la continuidad de las clases. Nada más y nada menos. Que no estábamos preparados no hace falta decirlo. Toda nuestra comunidad estuvo involucrada en el desafío.

 

Hoy parece lejano el momento de los debates. Presencialidad o virtualidad. Valorando la opinión de la comunidad pudimos hacerlo. Sobreponernos a la realidad impuesta por el ASPO. Como lo hicimos con las clases, lo hicimos con muchos otros temas, desde el primer día, y con la misma filosofía.

 

 

Continuidad de la carrera docente con más de 100 concursos.

En este punto, la primera tarea fue despachar finalmente una gran cantidad de concursos que permanecían demorados, posibilitando la continuidad de la carrera académica de nuestrxs docentes. En la primera sesión de Consejo con las funciones de la secretaría a mi cargo, se destrabaron más de 100 concursos regulares, que fueron enviados al Consejo Superior. Quedan otros muchos que, en cuanto se normalice el funcionamiento de Comisiones y Consejo Directivo, seguramente serán despachados de igual manera.

 

Normalización de cátedras

También se normalizaron, con esfuerzo y grandes debates, la casi totalidad de cátedras de la carrera de arquitectura pendientes, proceso que llevaba años demorado y reclamado.

 

Curso de verano masivo

Implementamos un curso de verano que se constituyó, en la práctica, en un tercer cuatrimestre, con una oferta de 88 asignaturas, para todas las carreras y 5024 estudiantes inscriptos. Una solución muy positiva para la Facultad y que surgió como producto del trabajo conjunto de profesores, docentes, estudiantes y la Secretaría Académica.

 

Big data FADU

Adicionalmente, trabajamos intensamente en la recopilación de datos, que nos permitieran tener una foto muy certera respecto de la estructura de cátedra de todas las asignaturas, de todas las carreras, de cara a proponer a la comunidad un nuevo modelo de designaciones docentes que aporte racionalidad y evite desproporcionalidades, arbitrariedades y cargos postergados.

 

Rediseño colectivo de la cursada 2020 para la virtualidad

Consultamos a los profesores, equipos docentes y estudiantes. Entre todxs replanteamos ciclos lectivos y calendarios “pandémicos”. Diseñamos herramientas para lo que llamamos “Acompañamiento Académico”. Desarrollamos “EsAcá” con presencia de actividades y propuestas académicas de las cátedras de todas las carreras de FADU y “Acervo FADU” que nos permitió y permite el acceso a la Biblioteca FADU, al AID (Archivo de imágenes digitales), al CAM (Centro Audiovisual Mediateca FADU) y al DAR (Dirección de Archivos de Arquitectura y Diseño Argentinos). Desarrollamos y coordinamos capacitaciones, consultas y asistencia a los equipos docentes, batiendo el récord de la UBA con la primera capacitación docente para 2421 inscriptxs de la FADU. Trasladamos turnos de cátedras a pedido de los modelos de dictado definidos por las mismas; abrimos el tercer cuatrimestre; moviendo turnos, asignaturas y el cuatrimestre de estudiantes y docentes de acuerdo a sus necesidades específicas. Habilitamos un sistema de inscripción a distancia para las situaciones no contempladas en el SIU Guaraní y la posibilidad de presentar notas y solicitudes a distancia. Convertimos todos los trámites académicos dependientes de FADU a modo remoto.

 

Campus virtual FADU

Cada nueva alternativa habilitada significó un rediseño de protocolo y una nueva herramienta virtual. Y mucha gente desde muchos lugares diferentes trabajando para hacerlo posible. Pero tal vez el desafío más grande fue el Campus Virtual FADU. Un proyecto demorado por años y diseñado e implementado en tiempo récord, con la invalorable ayuda de la UBA a través de Citep y el extraordinario equipo FADU que lo hizo y hace posible.

Hoy el campus virtual es una realidad y el verdadero bastión tecnológico del dictado de clases no presenciales de FADU.

 

Mails fadu.uba.ar

Resolvimos e implementamos los mails fadu.uba.ar, con el soporte y todo el paquete de herramientas de google, incluido Drive con capacidad ilimitada para docentes y estudiantes de FADU. Un kit fundamental para facilitar acceso, archivo y dictado a distancia. Y por supuesto el contacto y sentido de pertenencia.

 

Digitalización de designaciones

Implementamos las designaciones remotas de los planteles docentes, reemplazando la presentación de planillas de designación presenciales por virtuales y corriendo todos los pasos posibles de manera virtual. Flexibilizando la presentación de documentación para las altas docentes y armando equipos virtuales de trabajo de nodocentes; desarrollando modos de acceso y envío de datos para cada área, vinculando Académicas con Asuntos Docentes, Dirección de Personal, Sueldos y la UBA.

 

Empadronamiento virtual

Para posibilitar el acceso al segundo cuatrimestre de los ingresantes 2020. Se trasladó el proceso de empadronamiento para los nuevos ingresantes desde el CBC –también flexibilizado–, a modos no presenciales. Con todos los trámites e inscripción llevados a modo remoto.

 

Trámites a distancia

Aparecieron muchas necesidades, de todo orden, que se resolvían presencialmente y que impedían muchas situaciones. Desarrollamos infinidad de trámites virtuales: constancias de alumno regular, certificados de examen, constancia de materias aprobadas, títulos en trámite, inscripciones, presentación de notas, documentos que reemplacen los certificados analíticos imposibilitados por el Ministerio de Educación, etc.

 

Entrega de diplomas

La inminente entrega de los primeros 407 diplomas en medio de la pandemia durante el mes de Setiembre, para que los egresados cuenten con esta herramienta central para su desarrollo profesional.

 

Exámenes no presenciales

Y el último y más grande desafío, la toma de exámenes no presenciales. Otro gran esfuerzo, en primer lugar, de los equipos docentes, pero también de toda la estructura académica de la FADU. Una herramienta fundamental para que no se detengan los trayectos académicos de nuestrxs estudiantes. Para ello brindamos asistencias puntuales y grupales, se desarrollaron y compartieron documentos formativos, de capacitación, instructivos, herramientas y aplicaciones para posibilitar y facilitar la toma de los mismos.

 

Es necesario hacer este recorrido. Y no en términos personales, sino porque detrás de cada tarea hay un enorme esfuerzo y trabajo de mucha gente invisible a la que necesito agradecer.

 

No debiera ser necesario hacerlo con las autoridades, porque es nuestra obligación ponerle el cuerpo y dejar todo por la FADU y la educación pública. Igualmente quiero hacerlo. Desde el Decano, por su confianza y apoyo, junto al de los miembros del gobierno que me acompañaron, en especial con el grupo de funcionarios que cruzaron los límites de sus oficinas y siempre estuvieron ayudando a pensar la mejor solución y a que las cosas sucedieran. Ellxs saben.

 

A lxs profesores, docentes y estudiantes que pusieron una energía y un esfuerzo descomunal para llevar a la realidad este enorme proceso al que no dudo en calificar de “épico”.

 

A las organizaciones estudiantiles que entendieron la situación y ayudaron proponiendo, explicando y difundiendo las nuevas modalidades y procesos.

 

Y muy especialmente al equipo extraordinario de no docentes que acompañó mi corta gestión. Trabajando desde sus casas. Siempre disponibles. Sin sábados ni domingos, ni horarios. Voluntariamente, sin pedirlo. Siempre con buen humor. Siempre con la camiseta de la FADU puesta. ¡Lxs quiero siempre en mi equipo!

 

Hoy empieza una transición que estoy seguro será virtuosa y me encontrará disponible y activo para ayudar a que la Facultad sea un espacio público y académico a la altura de lo que nuestra comunidad espera, necesita y merece.

 

Es bueno poder reconocer en este momento que todos los errores fueron individuales y los aciertos, colectivos.

 

Gracias por la oportuna confianza.
Gracias por la paciencia.
Gracias por el esfuerzo y compromiso.
Y a seguir trabajando.

 

Prof. DG. Carlos Venancio.
Vicedecano UBA, FADU.